Caso de éxito

Se inicia una reclamación previa a la compañía aseguradora, la cual es rechazada bajo el pretexto de ser culpa exclusiva de nuestro cliente. Se procede a contratar los servicios de nuestro perito médico colaborador para determinar y cuantificar las lesiones sufridas, así como nuestro perito colaborador experto en daños materiales para cuantificar los daños causados en la motocicleta BMW de nuestro cliente. Una vez tenemos conocimiento de la cuantía a reclamar, la cual asciende a algo más de 20.000 euros, se interpone la demanda en los Juzgados de Primera Instancia de Madrid. El Juzgado, en un primer momento, entiende que no es competente, motivo por el cual procedemos a recurrir a la Audiencia Provincial, la cual finalmente determina que el Juzgado de Madrid es el competente territorialmente. 

Una vez se celebra la vista, comparecen como testigos los compañeros de ruta de nuestro cliente, entre los cuáles se encontraba el causante del accidente, quien no duda en reconocer su culpa debido a no respetar la debida distancia al realizar una frenada, tirando a nuestro cliente al suelo. 

Finalmente, se condena a la compañía aseguradora a pagar una indemnización a mi cliente por los daños materiales de la moto BMW, así como los daños personales o lesiones sufridas por cliente, junto con las costas e intereses que establece la Ley del Contrato de Seguro, los cuáles ascienden al 20% a partir del segundo año.